BLOIS - Por primera vez en la historia de las tres bandas, el oro mundial femenino es para una jugadora danesa. Charlotte Sörensen, de 41 años, una estrella en ascenso en los últimos años, se consagró campeona del mundo en Blois, Francia, en una final contra Therese Klompenhouwer de Países Bajos. La batalla por el oro se convirtió en un verdadero espectáculo: el punto ganador, fue un super tiro.
La nueva campeona del mundo aseguró el premio mayor de 10,000 euros cuando todo estaba 29-29. Charlotte Sörensen, quien trabaja en la agencia tributaria danesa, lloró de alegría. "Nunca pude soñar con el título mundial", fueron sus primeras palabras en el escenario donde acababa de lograr su primer gran éxito. "Fue tremendamente emocionante, tuve una gran ventaja, pero Therese hizo un gran trabajo par alcanzarme. Y así llegamos a la parte final.
Charlotte Sörensen y Therese Klompenhouwer estuvieron acompañadas en el podio por Karina Jetten de Países Bajos y Yén Nhi Hoàng Nguyen de Vietnam. Además del premio principal de 10,000 euros, el título mundial le otorga a Charlotte Sörensen, quien vive a una hora de Copenhague, un boleto para competir en los Juegos Mundiales del próximo año en China, donde el billar femenino será incluido por primera vez, junto a 11,000 atletas de todo el mundo.
La danesa logró este pase gracias a su victoria en la final, donde Therese Klompenhouwer, cinco veces campeona del mundo, comenzó con series de 5 y 4 puntos (liderando el marcador). Charlotte Sörensen, con gran determinación, empató 14-14 con una serie de 8. El puntaje se mantuvo parejo hasta 21-18, antes de llegar al emocionante clímax. Sörensen dio el primer golpe con una serie de 7, llegando a 28-21. Klompenhouwer, bajo una gran presión pero mostrando confianza, respondió con una serie de 8, alcanzando 28-29. Ambas jugadoras fallaron en sus turnos, quedando el marcador en 29-29, hasta que llegó el momento de gloria para la danesa, la nueva campeona del mundo.
Charlotte Sörensen comenzó a jugar tres bandas hace solo cinco años, después de haber practicado el juego danés de 5 pines ó 5 quillas como se le conoce en Argentina. "Me cansé de eso y quería empezar a jugar tres bandas", explica. "Cuando vi más progreso en mi juego, empecé a practicar más. Tengo un entrenador, Tonny Carlsen, que me da clases tres veces al año y también me entrena a distancia. Tengo una mesa de competición en casa, donde trato de entrenar una hora cada día".
La danesa tuvo un verano en el que el billar pasó a un segundo plano. "Estaba un poco cansada, había perdido el enfoque, así que decidí desconectarme por unas semanas. Con mi novio y mi perro, nos fuimos de vacaciones a una cabaña en Dinamarca. Después de eso, retomé mi entrenamiento. Estaba increíblemente feliz por mi victoria sobre la coreana Park y luego sobre la vietnamita Nguyen. Pero nunca creí que podría vencer a Therese y convertirme en campeona del mundo".
Therese Klompenhouwer, quien luchó de manera excepcional, quedó abatida momentáneamente tras la derrota en la final. "Felicité a Charlotte por esta final maravillosa, en la que ambas tuvimos oportunidades de ganar. Ella logró su ventaja con series altas, yo remonté bien, pero lamentablemente me faltó un punto. Esta noche dormiré muy mal por esa bola de partido que fallé".

El podio mundial con, de izquierda a derecha, Therese Klompenhouwer (2.ª), Charlotte Sörensen (campeona), Yen Nhi Hoang Nguyen y Karina Jetten (3.ª)

Charlotte Sörensen besa su taco tras ganar el título

Charlotte Sörensen en el partido final con Therese Klompenhouwer
Semifinales:
Therese Klompenhouwer vs. Karina Jetten: 30-22 en 21 entradas
Therese Klompenhouwer se preparaba para luchar por el oro, mientras que Karina Jetten aseguró un lugar en el podio. Así concluyó la segunda semifinal en un duelo entre holandesas que se mantuvo igualado hasta bien avanzado el encuentro. Klompenhouwer tuvo que remontar una pequeña desventaja (22-21), pero cerró con un impresionante sprint final de 2, 3 y 5 carambolas para asegurar la victoria y un puesto en la final contra Charlotte Sörensen.
El enfrentamiento holandés se jugó a un alto nivel: Therese comenzó con una serie de 9 en la entrada 4, sumó otra de 5 para ponerse 18-11 en la entrada 14, mientras que Karina tuvo un sprint de 7 en la segunda mitad que llevó el marcador al 21-20.
Therese vengó su derrota del Gran Prix de hace dos semanas, cuando Karina Jetten la había vencido. Antes del partido, Klompenhouwer ya había anticipado: "Este será un partido diferente, un campeonato mundial implica más presión que un Grand Prix". La jugadora más experimentada manejó mejor esa presión. Therese se mantuvo serena en los momentos decisivos y logró la tan ansiada victoria. Karina Jetten puede sentirse orgullosa de su actuación en este mundial, demostrando que su nivel ha sido muy alto en los últimos meses y ha ganado mucha confianza. Sin embargo, su eterna rival holandesa resultó ser demasiado fuerte en el último paso hacia la final.

Therese Klompenhouwer en la semifinal contra Karina Jetten

Therese y Karina se despiden de beso en la mejilla al final del encuentro

Karina Jetten ha subido de nivel en los últimos meses
Charlotte Sörensen vs. Yén Nhi Hoàng Nguyen: 30-15 en 32 entradas
El billar europeo celebró la llegada de una nueva jugadora de primer nivel a las semifinales. Charlotte Sörensen, de 41 años, trabajadora a tiempo completo en la oficina de impuestos de Dinamarca y pareja de Tommy, un jugador de tres bandas, se convirtió en la primera finalista al vencer a la vietnamita Yén Nhi Hoàng Nguyen, de 24 años, madre de una niña de 3 años y campeona de su país, con un marcador de 30-15 en 32 entradas. Sörensen dominó el partido desde el principio: 11-1, 13-4, 17-11, 24-15 y finalmente 30-15.
Hasta ahora, el mejor resultado de Charlotte en un campeonato mundial había sido el año pasado en los Países Bajos, donde llegó al top 8. Este torneo representó su verdadero gran avance en su carrera. "Disfruté mucho este último y decisivo día", expresó.
Yén Nhi Hoàng Nguyen se despidió con un buen recuerdo. “El podio era mi objetivo, lo logré y estoy feliz por ello. Espero inspirar a muchas chicas vietnamitas y mujeres a incursionar en el billar a tres bandas. Vietnam está en camino de convertirse en un gran país del billar, y espero que muchas mujeres también lleguen a la cima en este deporte”.

Charlotte Sörensen ganó 30-15 en semifinales

El vietnamita Nguyen en semifinales
