Orie Hida regresa a las alturas

14/05/2017

Publicado por juan fraile

La japonesa fue la mejor en Bélgica

ZOERSEL - La japonesa Orie Hida, de 41 años, fue la primera campeona del mundo de tres bandas de mujeres. Trece años más tarde volvió a lo más alto en Zoersel (Bélgica) este domingo por la tarde. Sus emociones eran intensas y modestas cuando el himno japonés sonó a través de los altavoces en la sala de juego. Con su victoria, ganó su cuarto título mundial. La asiática destronó a la holandesa Therese Klompenhouwer después de dos títulos. La joven coreana Mi Rae Lee, de 20 años, no pudo lidiar con la presión en un partido final como sucedió el año pasado.

En la jornada final del séptimo campeonato del mundo, Orie Hida derrotó por primera vez a Gülsen Degener en un thriller por una diferencia de una carambola (30-29 en 47 entradas). La pequeña Mi Rae Lee, que parece una dulce y agradable colegiala, parecía estar lista para su primera medalla de oro después de su victoria sobre la danesa Marianne Mortensen (30-8 en 26), pero palideció en la final. La japonesa fue la mejor en el partido entre dos jugadores elegantes, 30-19 en 37.

La sonrisa gentil en el rostro de la nueva campeona fue acompañada por infinitas muestras de respeto hacia su oponente y saludos a todos, desde el árbitro hasta los espectadores en la abarrotada sala de juego De Kapel. La japonesa, soltera, que reveló en la anterior Copa del Mundo que le gustaría casarse y tener un bebé, es un ejemplo de sencillez y amabilidad.

Estaba orgullosa y feliz con su título, no con el nivel que jugó. Ninguna de las jugadoras terminó con más de "uno" de promedio, sólo la destronada Therese Klompenhouwer estuvo cerca (0.980). La serie más alta (ocho) fue compartida por Orie Hida y Mi Rae Lee, que cerró su partido contra Marianne Mortensen con la mejor serie del torneo.

La danesa, por primera vez en el podio mundial, hizo un pequeño milagro cuando superó a Therese Klompenhouwer, la favorita indiscutible. Los holandeses quedaron aún más decepcionados al ver que Mortensen sólo anotó ocho bolas en la semifinal y no alcanzó los 0.400 del promedio.

La final asiática deja claro que las damas de billar en Corea del Sur y Japón tiene más talentos que Europa. Therese Klompenhouwer fue la única que rompió la hegemonía con dos títulos consecutivos en 2015 y 2016. El futuro de las damas de tres bandas, también subrayado por Orie Hida, está en manos de Mi Rae Lee, que demostró en este torneo su maravillosa técnica, pero tuvo demasiados altibajos y no pudo atacar en los momentos decisivos, como en la final del año pasado contra Therese Klompenhouwer.

El séptimo campeonato mundial no fue el torneo de muchos puntos destacados. Dos partidos, de Therese Klompenhouwer y Orie Hida en 15 y 17 entradas, y la última serie de Mi Rae Lee (ocho) fueron los mejor para ver en tres días en este escenario mundial. Además de la joven coreana, no aparecieron nuevos talentos. El podio fue reservado además para las jugadores conocidas por muchos años en otros torneos internacionales.

La belga Danielle le Bruyn no pudo llegar a la ronda final: no es tan extraño porque trabajó muy duro en la preparación del torneo. Gülsen Degener, que jamás jugó una final en un campeonato del mundo, nunca estuvo tan cerca. Tuvo una oportunidad real de vencer a Orie Hida después de un buen comienzo (10 caramboles por delante), pero en la segunda parte del partido cedió terreno y perdió un lugar en la final por un punto. "Estaba lista para finalmente conquistar el título", dijo Gülsen después. "Aunque espero encontrar la inspiración para volver y seguir jugando fuerte".