Jaimie Buelens: Participar en el Grand Prix me resulta costoso

GANDIA - Las mejores jugadoras europeas de tres bandas se están preparando para competir en el Gran Premio en la ciudad costera española de Gandia este próximo fin de semana. Therese Klompenhouwer es la clara favorita para ganar en un campo de 24 jugadoras. Las jugadoras holandesas y españolas están mejor representadas con 7 y 6 jugadoras respectivamente. Jaimie Buelens, una de las mejores jugadoras, la número 2 en el último campeonato europeo en Ankara, no estará presente. La belga es sincera: "No puedo costear mi participación en el torneo, es demasiado costoso para mí". El Grand Prix Predator de tres bandas, el primero de este año e invita a las mujeres a participar. Los torneos Grand Prix son una gran iniciativa de la federación europea y Predator. Pero a diferencia, por ejemplo, de las Copas del Mundo masculinas, donde los jugadores sembrados reciben dinero para viajar, las mujeres deben pagar todos los costos ellas mismas, como el vuelo a Valencia, alojamiento en hotel, transporte, comida y bebidas, Therese Klompenhouwer estima que las mujeres deben pagar alrededor de unos mil euros. Las holandesas, con las mejores posibilidades de ganar, pueden pagar el viaje con el premio principal de 1,500 euros. Para otras jugadoras, es un viaje caro. Jaimie Buelens: "No recibo el apoyo de alguna entidad o patrocinador, así que todos los costos los debo asumir yo. Y debido a que tengo que trabajar duro, un Gran Prix como este no es asequible para mí, algo muy lamentable, porque por supuesto que me encantaría jugar allí".

La belga asegura que encontrar un patrocinador no es una opción. "Eso sería buscar una aguja en un pajar". Ella se da cuenta de que no participar en este Gran Premio le costará puntos en la clasificación. "Fui segunda en los Campeonatos Europeos, así que estoy en uan posición alta en la clasificación mundial, pero aquí tengo que perder puntos de clasificación". Eso podría privar a Buelens de la oportunidad de ser enviada a los Juegos Mundiales en China en 2025. La número 1 y 2 de Europa, casi con seguridad Therese Klompenhouwer y otra jugadora, pueden competir allí por primera vez en la historia del billar femenino. Por ahora, Klompenhouwer es la número 1 con 208 puntos por delante de Charlotte Sörensen con 112, Estela Cardoso con 110, Jaimie Buelens y Karina Jetten con 92 puntos.

Therese Klompenhouwer se da cuenta de que para varias jugadoras holandesas, esto es una especie de viaje de vacaciones a Gandia, donde la playa esta a 300 metros del lugar del torneo y la temperatura oscila entre 25 y 27 grados esta semana. Therese: "Lo bueno de estos torneos Grand Prix, del cual el segundo es en Bélgica en agosto, es que puedes ganar puntos de clasificación. Así que estás obligada a participar. Si no puedes pagarlo, entonces tienes mala suerte y te quedas atrás en la clasificación. Y para Jaimie Buelens esto es muy desafortunado, porque pierde puntos, así que en realidad este no es el mejor sistema para ella. Pero de todos modos, es lo mismo para todos. Yo también pago todo yo misma".

El Gran Premio se jugará en el Hotel Gandia Palace. Este viernes 10 de mayo comienzan las primeras rondas preliminares a las 9.30 am. El domingo las semifinales serán a partir de las 10 am, con la final a las 4 pm. La federación española organiza este Gran Premio Ciutat de Gandia junto con la CEB, la federación europea. Rainer Selgrath es el encargado de la CEB. Las primeras ocho jugadoras en la clasificación tuvieron el primer derecho de participación, luego dos jugadoras por federación y de lo contrario hay entrada libre: las primeras en inscribirse serán admitidas.

Seis ganadoras de grupo y las dos mejores segundas de las rondas preliminares pasan a los cuartos de final. En las rondas preliminares se juega a 25 carambolas, en los eliminatorios la distancia sube a 30 puntos. Todos los partidos se pueden ver en Kozoom.

La ganadora recibe 1,500 euros, la segunda 750, las terceras 500, del 5 al 8, 250 euros adicionales.

Jaimie Buelens, la número 2 en Europa, tiene que quedarse en casa debido a los elevados costos para participar en el Grand Prix