LINT – Cuando era joven, fue uno de los grandes talentos de Bélgica, y de vez en cuando sube a los primeros lugares en los torneos de Europa. Steven van Acker tiene ahora 40 años, trabaja a tiempo completo y juega billar en las ligas belga y neerlandesa, aunque rara vez se le ve en las Copas del Mundo. Este lunes, el jugador belga tuvo un comienzo sobresaliente en la Copa del Mundo de Lint, con un promedio de 1.764 en sus dos partidos. Terminó primero en su grupo, por delante del griego Kostas Kokkoris, conocido por su título europeo por equipos. En la clasificación del día, Van Acker lideró por encima de Dionisis Tsokantas, Beom Yeol Lee, Peter De Backer y Philippe Vandendriessche. Siete belgas superaron la fase inicial de PPPQ.
Steven van Acker tuvo en su momento la oportunidad de abrirse camino. En su veintena, fue subcampeón en el Mundial Juvenil de 2003 detrás de Filipos Kasidokostas, y dos años después terminó tercero en el mismo torneo, detrás de Javier Palazón. En esos dos campeonatos mundiales, Van Acker venció a jugadores como Sameh Sidhom, Rubén Legazpi, Sergei Jiménez y Jeffrey Jorissen. No fue casualidad: también fue subcampeón del Campeonato Europeo Juvenil de 2005, detrás de un neerlandés hoy casi olvidado, Nick Zuykerbuyk. Años más tarde, Van Acker volvió a subir al podio en un campeonato belga, detrás de Frédéric Caudron y Jef Philipoom.
Todo esto demuestra que Steven van Acker no es un jugador cualquiera. Este lunes fue uno de los mejores representantes belgas en la jornada inaugural de la Copa del Mundo. Su primer rival fue Marc Celen, uno de los organizadores voluntarios, a quien derrotó ampliamente: 40–11 en 19 entradas. Su segundo partido fue aún más impresionante: Van Acker venció a Kostas Kokkoris 30–16 en 15 entradas.
El mejor de los belgas dominó incluso un grupo que contaba con tres jugadores de gran nivel. El francés Tangui Duriez, el belga Thomas Broux y el español Daniel Sainz Pardo llegaron a esta Copa del Mundo con ambiciones. Duriez comenzó de forma brillante al vencer a Broux 30–11 en 14 entradas. Luego, Daniel Sainz Pardo derrotó al belga 30–23 en 22 entradas. El partido decisivo dejó al ganador del llamado “grupo de la muerte”: Duriez no pudo repetir el nivel de su primer encuentro y cayó ante Sainz Pardo 30–21 en 25 entradas.
Otro belga destacado en la jornada fue Peter De Backer. En un grupo compuesto por tres jugadores belgas, uno de ellos Bart Ceulemans, quien tuvo un mal día, De Backer brilló por su clase y consistencia: venció a Bart Ceulemans 30–15 en 20 entradas y a Davy van Haevere 30–25 también en 20 entradas, con un promedio de 1.500.
El coreano Beom Yeol Lee tuvo un inicio prometedor, con victorias cómodas sobre Ferrara y Oliveto, alcanzando un promedio de 1.538. El mismo promedio registró el griego Tsokantas.
Therese Klompenhouwer, que llegaba al torneo con un reciente título mundial femenino, no logró mantener grandes expectativas. La neerlandesa fue eliminada tras una serie de cinco carambolas de Henk Blauwblomme, uno de los belgas más destacados del día, con un promedio de 0.967.
Cédric Melnytschenko eliminó al veterano Martin Spoormans 30–27 en 28 entradas. Pedro González hizo lo propio con Dirk Weeremans, 30–20 en 30, aunque sin una actuación de nivel estelar: el colombiano terminó con un promedio de 1.016. Philippe Vandendriessche venció, entre otros, a Francis Forton y avanzó con un promedio de 1.363.

El panorama del primer día en el estadio del Mundial

El jugador coreano Boom Yeol Lee entre los tres primeros

El español Daniel Sainz Pardo ganó el grupo de la muerte
Los ganadores del día:
- Steven van Acker 4-1,764-8
- Dionisis Tsokantas 4-1.538-8
- Beom Yeol Lee 4-1.538-7
- Peter De Backer 4-1,500-5
- Philippe Vandendriessche 4-1.363-8
- Daniel Sainz Pardo 4-1.276-7
- Joseba Escribo 4-1.153-11
- Pedro Gonzalez 4-1,034-8
- Dany Boutet 4-1,000-9
- Henk Blauwblomme 4-0.967-4
- Cédric Melnytschenko 4-0.882-5
- Konstantinos Prassas 4-0.869-5
- Quoc Thuan Pham 3-1.052-5
- Ronny Brants 3-0.869-7
- Paul Wallerand 2-0.916-4
