El enfrentamiento entre los dos supervivientes españoles en Antalya fue uno de esos partidos en los que ambos entran a la mesa con el pie o mano cambiada, con respeto, ciertos nervios, tensión y, aparentemente sin la misma motivación que si jugasen ante cualquier rival de otro país.
La cuestión es que el principio se nos hizo muy lento, casi eterno. Un par de errores dieron paso a posiciones muy complicadas que se sucedían una tras otra. Esa situación provocaba que ni Javi ni Daniel llegasen a soltar el brazo casi nunca. Cuando alguien lograba solucionar el "siete de bastos" que dejaba el contrario, la posición siguiente era igual o más complicada todavía.
Doce entradas y el marcador reflejaba 8-10 para Dani. La siguientes cuatro entradas fueron productivas para el valenciano que logró 14 carambolas (5-0-6-3), aunque Dani tampoco perdía la cara al partido (24-20).
Fue en ese momento en el que Palazón, a un ritmo casi "Caudroniano", logró una serie de nueve para poner el marcador en un 33-20. Como gran campeón que es, y a pesar de las adversidades en forma de posiciones extraterrestres, Daniel se acercó hasta el 34-28. Otra serie de cinco puso al de Paiporta a un punto de una victoria que consumó en la entrada siiguiente. Daniel lo intentó en la contrasalida. Necesitaba 11 y se acercó hasta seis dejando el 40-35 para la historia de Antalya.
Como titulábamos ayer, el billar español tendrá un representante en cuartos de final. Será Javier Palazón que a las 17.00 horas se enfrentará al francés Bury. Suerte para Javi y que podamos ver al español en semifinales.